Pablo Aguado y Miguel Ángel Perera comparten con los jóvenes del CEU su visión sobre el toreo, la fe y la preparación mental

Pablo Aguado y Miguel Ángel Perera comparten con los jóvenes del CEU su visión sobre el toreo, la fe y la preparación mental

El salón de actos del Campus Universitario CEU de Andalucía se llenó para recibir a dos grandes figuras del toreo, Pablo Aguado y Miguel Ángel Perera, que participaron en una nueva sesión de Vida CEU, dedicada en esta ocasión al mundo taurino. Ante un auditorio repleto de jóvenes, los matadores compartieron su experiencia y reflexionaron sobre aspectos fundamentales de su profesión como la preparación física, la salud mental, la fe y los valores del toreo.

El acto, presentado por Santiago López, responsable de Vida Universitaria, y moderado por José Enrique Moreno, director de Comunicación de la empresa Pagés, sirvió además para presentar el Club Taurino de la Universidad CEU Fernando III, impulsado por el alumno Fernando Pascual, con el objetivo de acercar la tauromaquia a los universitarios.

Pablo Aguado destacó la importancia de contar con un público joven en las plazas: “Es muy motivador ver a tantos niños y jóvenes en los tendidos”. Sobre la preparación física y mental, explicó que “cada torero tiene su rutina, pero lo fundamental es mantener la mente fuerte; el mejor psicólogo para un torero es otro torero”. El sevillano también abordó la relación entre la fe y el toreo: “Me santiguo muchas veces antes de que salga el toro, pero luego pienso que debería dar más gracias a Dios y no pedirle tanto”.

Por su parte, Miguel Ángel Perera celebró la iniciativa del CEU y la asistencia de tantos jóvenes. “El toreo se ha profesionalizado mucho; antes la preparación era básica, hoy es más técnica y mental”, apuntó. El extremeño reconoció que “los nervios siempre están presentes, aunque lleves años en esto. La exigencia y el perfeccionismo pueden llevarte a la negatividad, por eso intento quedarme con lo positivo”.

Perera también habló de la fe como parte de su día a día: “Le doy gracias a Dios por tener a mi gente con salud, tengo a Dios muy presente siempre”. Para concluir, subrayó que “el toro sigue siendo un icono de nuestra cultura, una seña de identidad que debemos seguir defendiendo y dando a conocer”.