Por Redacción 
El segundo encierro de San Fermín ha sido fiel a la fama de los toros de Cebada Gago: largo, tenso y con el primer herido por asta del año. La carrera se ha prolongado durante 5 minutos y 22 segundos por culpa de ‘Caminante’, un toro que se descolgó del grupo en Estafeta y sembró el desconcierto.
La manada ya salió estirada desde los corrales, con un toro castaño liderando el tramo inicial y ofreciendo carreras limpias. Cuatro astados más completaron el recorrido sin incidentes graves. Pero ‘Caminante’, último en el grupo, rompió la armonía: se negó a seguir el ritmo, se giró varias veces y embistió sin tregua a mozos, pastores e incluso a los cabestros ‘escoba’ pasada la curva de telefónica ya a la entrada de la plaza.
Los momentos más críticos se vivieron en el tramo de telefónica, donde arremetió contra corredores y vallado, provocando varias cogidas. Finalmente, pudo ser reconducido hasta la plaza gracias al buen trabajo de los pastores y dobladores.