Puerta grande para El Fandi, en un cierre de Fallas en el que Ureña brilló al natural

Última tarde del ciclo fallero, día del patrón y muy buena entrada en los tendidos, casi dos tercios cubiertos en una jornada que tradicionalmente está marcada por la comida familiar en casa, e ir a la plaza resulta complicado. El Fandi sorteó el mejor lote del envío salmantino de Montalvo y logró rubricar una tarde vibrante cortando una peluda de cada uno de sus toros. Faena de premio fue la de Ureña con el quinto, sublime estuvo con la zurda el torero murciano, que de haber funcionado los aceros, estaríamos hablando de premio gordo. Menos suerte corrió el cacereño Emilio de Justo, que tuvo en suerte el peor lote y todo quedó en silencio.

Lo paró El Fandi por verónicas al primer Montalvo de la tarde, antes de llevarlo galleando por chicuelinas a su primer encuentro con el caballo. Tras hacer su correspondiente quite Paco Ureña, se lució El Fandi en el tercio de banderillas. Tuvo prontitud y ritmo en las embestidas el toro, que embistió en la franela del granadino toreándolo por los dos pitones con largura en una labor que hizo vibrar los tendidos. Mató de una buena estocada. Oreja

Serio por delante fue el segundo que salió suelto, y apenas le dejó dar tres lances a la verónica a Paco Ureña. Por chicuelinas realizó su quite Emilio de Justo antes de que Ureña cogiese la muleta para comenzar la faena por estatutarios. Ya en los medios dejó una buena serie de derechazos de mano baja en los que destacó el poder del murciano, cuando se puso por el izquierdo el toro se quedó más corto en los viajes y se vino a menos. Fue un animal noble pero que se apagó pronto por su escasez de fuerza. Mató de una buena estocada. Ovación con saludos.

Acapachado de pitón fue el cinqueño tercero que siempre embistió en el capote de Emilio de Justo con las manos por delante haciendo un saltito. Brindó en los micrófonos de OneToro para la afición colombiana, antes de sacárse al toro por doblones bajos con la rodilla semiflexionada. Fue este un animal que siempre fue andando a la muleta del cacereño, y cada vez calamocheaba más en cuanto tocaba la muleta. No quiso embestir el Montalvo, y De Justo de fue a por la espada. Metió la mano con habilidad.

Con buena lidia capotera recibió El Fandi al cuarto de la tarde que lo cerró en los medios. No peleó en sus dos encuentros con el picador, que en cuanto vió la salida huyó del caballo. Tras brindar al respetable, se puso de rodillas en la tablas y fue sacándose al toro a los medios donde fajó series de derechazos ante un toro que desarrolló nobleza en la muleta del granadino. Siempre quería salir desentendido al final de las series, pero El Fandi lo enganchaba con la muleta para rematar. El final por molinetes y un circular invertido calentó al público valenciano antes de que dejase un pinchazo hondo agarrado que fue suficiente para la muerte del Montalvo. Oreja

No se dejó el quinto en el capote de Paco Ureña. En su paso por el jaco puso complicaciones porque no quería pelea. Tras brindar a una joven en el tendido,  cogió la muleta en mano y el toro rompió a embestir por el pitón izquierdo, donde Ureña dibujó unos naturales muy profundos en los que vació la embestida hasta el final. Sensacional estuvo el murciano en las series que dibujó con la zurda. El final de faena fue con una serie por el derecho al natural (sin ayuda) con la que hizo vibrar los tendidos de la calle Xàtiva con unos muletazos muy templados. La pena fue la espada, donde dejó una media estocada que precisó de golpe de verduguillo y perdió la opción a trofeo. Palmas para el toro en el arrastre. Ovación con saludos para Ureña

Bajo serio y acapachado fue el último de la feria que no se fijó en el capote de Emilio de Justo que siempre salió suelto y distraído. Intentó hacer quite De Justo pero lo dejó ante un burel que no se empleaba. Al toro le costaba mucho despegarse, era muy parado y de recorrido muy corto Emilio ha estado muy por encima del toro, le intentó robar algunos muletazos pero finalmente decidió matarlo porque se vió sin opciones. El pinchazo muy tendido y el toro se echó rápido pero no por la estocada si no por la poca raza que tuvo.