Por: Lucas Gutiérrez
1.- «Dudasabia«. Anovillado y flaquito el primero de la tarde, salió andarín y distraído lo que provocó muchas quejas en el público por su condición y presencia. El toro perdió un par de veces las patas previo al primer puyazo, lo que acrecentó las quejas. En el caballo el animal apretó con la cara arriba pero con raza, derribando al caballo, más por incompetencia de Juan Bernal que no se agarró bien que por el de Valdefresno.
Un par de doblones de Emilio de Justo y el toro se cae, anunciando lo esperable, la invalidez del animal. Ya en los medios lo intenta el de Torrejoncillo, despacito en muletazos a media altura, cuidando al astado. De menos a más y poco a poco fue cogiendo vuelo la faena, nunca apretando de verdad al animal pero dejando detallitos sueltos con la diestra. Siempre lo mejor fueron los de pecho, de mucho recorrido y hasta el rabo. Media estocada, pinchazo y el toro se echa. Silencio para Emilio de Justo.
2.- «Cigarrillo«. Bien presentado el segundo de la tarde para una plaza de tercera, de buena cara y cuajado de cuerpo. Le recibió Jiménez Fortes por verónicas y una media de poco lucimiento por el nulo empleo del toro, el cual tomó un puyazo en la yema la cual protestó.
Brinda Jiménez Fortes a Torrejón y desde el tercio se pone con pases por arriba a pies juntos. Tras dos lances el animal se marcha a la querencia. Lo trata de sacar Fortes a los medios, ahí, con la diestra y dejándole la muleta en la cara para que el animal no se marche, traza su faena, siempre en el sitio e intentando ordenar las deslucidas embestidas del de Valdefresno. Tras un par de tandas el toro se vio superado y comenzó a ni si quiera pasar, acabado rajado y sin darle opciones al matador. Espadazo caído y un descabello. Silencio tras aviso para Fortes.
3.- «Pelotari». Volvió a bajar la presentación con el tercero de la tarde, el cual salió con las viveza y fijeza que sus hermanos, le veroniqueó con gusto Fernando Adrián hasta que tras cuatro lances el de Valdefresno se marchó sin dejarle rematar el saludo al madrileño. Medido y trasero puyazo tomó el toro en donde apenas se emplea.
Brinda Fernando Adrián a Torrejón mientras el toro marchaba de capotazo en capotazo, ya en los medios Adrián llama al de Valdefresno, dos pases por atrás, un derechazo y cuatro buenos de pecho para meter de lleno al público en la faena. Animal con más fijeza que sus hermanos y con cierta clase en la embestida, le aprovecha bien el madrileño para armar su faena marca de la casa con derechazos por abajo y profundos que hila a varios buenos cambios de mano. Baja la nota general de la faena el pitón izquierdo del animal, más soso y a media altura, se cambia rápido a la diestra por donde se da un último arrimón, armándole de nuevo un buen gazpacho al toro con derechazos muy largos y por abajo, yéndose a por la espada con el trofeo en la mano. La espada cae baja y suelta. Tres descabellos. Oreja para Fernando Adrián.
4.- «Bilbaíno». De buena presencia el negro que hizo de cuarto, más serio de cara y con cuajo. Como todos sus hermanos salió suelto y sin fijeza, sin darle opciones de lucimiento a Emilio de Justo. Se dejó pegar el animal en el caballo, el cual se fue directo a la querencia en cuanto pudo. Pegado a tablas recibió el de Torrejoncillo al toro y, siguiendo la tónica de la ganadería, tras dos pases por arriba este se fue derecho a toriles. En esos terrenos intentó hacer faena Emilio, sacando de donde no había y dejando algún buen derechazo en lo poco que le permitió el manso e inservible animal. Medio bajonazo. Silencio para Emilio de Justo.
5.- «Pelotillo». Negro, bien de cuerpo y suelto salió el quinto de Valdefresno, le costó pararle a Jiménez Fortes hasta que lo hizo con un ramillete de verónicas deslucidas por el nulo empleo del toro. Un picotazo en varas y a otra cosa.
Montera calada Jiménez Fortes comienza el trasteo pegado a tablas, sacándose al toro con la rodilla genuflexa y un par de buenos derechazos ante la poca nobleza del de Valdefresno. Nulo empleo del toro, que amenaza constantemente con rajarse y embiste dando cabezazos, saliendo con la cara por las nubes, ante eso, Fortes tiró de oficio y torería, para arañar los naturales de más peso de la tarde, en una tanda muy ligada, llena de sabor. Tras eso y cuando parecía que cogía vuelo la cosa, el animal acabó por rajarse. Bajonazo y dos descabellos. Silencio para Fortes.
6.- «Lisongero». Cierra plaza uno negro de no mejor presencia que sus hermanos, le recibió Fernando Adrián con dos faroles de rodillas, una verónica y tres chicuelinas en lo que fue el mejor recibo de capote de la tarde.
En los medios y de rodillas llama Fernando al toro, dos pases por atrás, uno de pecho, y un par de buenos naturales que hicieron despertar a Torrejón. Parecía con más fijeza el animal, cosa que aprovecho Fernando para cuajar dos buenas series de derechazos, a media altura y sin apretar de más al toro pero, muy ligadas y en redondo. Tras esas dos tandas el toro comenzó a costarle mucho pasar, obligando a Adrián a tirar de accesorios más que de toreo fundamental, pasándose el toro por la espalda unas cuatro veces más y dándose un arrimón con circulares invertidos y derechazos dejándose tocar por los pitones del toro, cosa que sirvió para volver a incendiar los tendidos. Bajonazo de libro que deja rodado el toro. Dos orejas para Fernando Adrián.
LA RESEÑA
Plaza de toros de Torrejón de Ardoz (Madrid) || Última corrida de la Feria Taurina de Torrejón 2025
Entrada: Casi lleno.
Toros de Valdefresno, bien presentados y de juego variado
- Emilio de Justo silencio y silencio.
- Fortes, silencio y palmas.
- Fernando Adrián, oreja tras aviso y dos orejas.
Incidencias: El matador de toros Jiménez Fortes sustituía a Marco Pérez, tras su percance de ayer en Alicante.

