Zaragoza, una plaza a la deriva por la inacción institucional

Zaragoza, una plaza a la deriva por la inacción institucional

Dicen que, una vez pasan los reyes, la temporada taurina empieza a andar con paso firme. Y así es. Tan real como que Zaragoza continúa sin novedades, instalada ya en una costumbre preocupante. En pleno diciembre, el coso de Pignatelli sigue sin empresario y, lo que es peor, sin un pliego adjudicatario sobre la mesa. La Diputación Provincial se mantiene inmóvil, incapaz de trabajar en favor de lo que debería ser la recuperación de una plaza que lleva años mostrando un declive anunciado.

Resulta desolador comprobar cómo Zaragoza paga, por unas razones u otras, los despropósitos de una institución que demuestra más desinterés taurino que compromiso. Desde que en octubre debió haberse liquidado la adjudicación vigente —aunque la falta de claridad institucional impide saber con certeza si el proceso se culminó en tiempo y forma—, se ha perdido un mes entero —noviembre— que era propicio para sacar a la luz un pliego que todos intuimos redactado desde hace tiempo. En lugar de ello, La Misericordia se ha convertido en el único caso en el que se conocen antes las empresas interesadas que las condiciones del propio pliego. Es como si Zaragoza hubiera llenado la lista de pretendientes sin presentar todavía a la novia y sus exigencias. Una metáfora que revela, al mismo tiempo, el atractivo que genera gestionar una de las plazas más importantes de España y el maltrato continuado al que está siendo sometida.

Tiempo ha tenido la Diputación para elaborar un documento serio, reflexionado y acorde a la categoría de la plaza. Desde que se agotó el primer cartucho de la etapa Zúñiga, se podía haber trabajado en un nuevo pliego escuchando las quejas de aficionados, prensa y profesionales. Ese tiempo, que debería haberse invertido en un análisis profundo con quienes verdaderamente conocen el pulso de la plaza, simplemente no se ha aprovechado. Y no se ha hecho porque, sencillamente, no hay afición dentro de la institución.

La consecuencia parece inevitable: otro pliego-subasta, temerario y nefasto para una plaza que exige criterio, personalidad y proyecto. Así, antes incluso de empezar, uno da por perdida la primera temporada de la nueva empresa. Porque, sea cuando sea que salga el pliego, ya será tarde para quien resulte adjudicatario. A estas alturas, el campo está prácticamente minado: las ganaderías están asignadas, vistas o compradas, pero Zaragoza sigue sin empresario y, por tanto, sin toros. Los supuestos acuerdos verbales de empresarios interesados en la plaza con ganaderos son papel mojado frente a cualquier otro empresario que llegue con una plaza segura y un adelanto económico a comprar esas corridas. Como siempre, para Zaragoza quedará lo que quede… y no por culpa de quien tome las riendas, sino por los tiempos marcados desde lo público.

La plaza necesita planificación y criterio. Necesita construir un San Jorge con sentido, que deje de ser una mini-feria de trámite previa a un Pilar que arranca ya debilitado por las pérdidas de abril. San Jorge requiere una reconversión seria para dejar atrás su carácter deficitario y convertirse, por fin, en un ciclo rentable y atractivo. Y eso es posible: con trabajo, afición y un pliego pensado en favor del toreo. Lo que no es viable es continuar con un modelo diseñado para recaudar a costa de una plaza que no recibe ni la mínima inversión en mejoras. Basta ver el estado de la cubierta: agujereada, deteriorada, prometida para su renovación y, sin embargo, todavía igual.

Así está Zaragoza hoy: desorientada, sin rumbo y sin nadie que tenga verdadera misericordia de ella. La falta de empresario no es fruto del desinterés del sector, sino de una gestión pública que mira antes por su beneficio que por la plaza y su afición. Y mientras no exista una patronal fuerte que plante cara y denuncie estas irregularidades, el toreo seguirá perdiendo terreno. En los últimos años lo está sufriendo especialmente Zaragoza. Supongo que es otra consecuencia de los tiempos que vivimos.

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