San isidro comienza sin sal

El primer toro de la ganadería de Alcurrucén, que se llamó Afectuoso para García Pulido en el día de su confirmación. Bien presentado de cabeza y de pitones. Lo recibió con el capote pero salió huyendo de la suerte sin terminar de humillar nunca en el capote de Pulido. Recibió el toro una vara bastante trasera por Carlos Prieto, de la que salió huyendo. Casi recibe un accidente el subalterno, el niño de Aravaca. Se fue el toro corriendo al caballo que guardaba la puerta, y recibió otro puyazo bastante perfilero sin clavarle las cuerdas. Comenzó la faena de muleta por dos tandas de derechazos, y en la tercera tanda le pegó un cambio de mano. Fue un toro noble con el que el confirmante cumplió, terminado la faena con una tanda de bernardinas bastante ceñidas que le confundieron un poco al toro pero tuvieron ceñimiento. Terminó con estocada trasera y desprendida. Petición y silencio

Salió «Rompe-Olas» en segundo lugar para Morante de la Puebla, un toro que tuvo una salida fría. Lo recibió muy sosamente con el capote antes de dejarlo al relance al caballo de picar sin colocación, donde recibió un puyazo sin humillar y tiró al picador del caballo. Empezó la faena de muleta donde destacaron un par de trincherazos, y poco más tuvo la labor del sevillano. Tres pinchazos, dos avisos y bronca para Morante.

Salió «Amoroso», que hizo tercero para Diego Urdiales que lo recibió desde el terció. De nuevo tuvo este una salida fría (típica de este encaste). Su paso por el caballo de «Chocolate» fue de dos puyazos , donde destacaron las verónicas con las que Urdiales colocó al toro. Buenas disposición del riojano, donde destacaron dos tandas templadas con la mano derecha en una faena que fue a menos puesto que el toro se fue afligiendo. Mató bien , y dio la vuelta al ruedo.

«Tamborilero» fue el toro del ecuador de la tarde, que fue mas basto de hechuras y manseó en el capote de Morante. Destacó con los palos Joao Ferreira, antes de que el sevillano abreviara y dejase tres cuartos de estocada. Pitos

«Chalino» salió abanto y se frenó en el capote de Urdiales. Manseó en la suerte de varas, donde siempre intento huir del caballo. No tuvo opciones el riojano ante este manso, donde dejó muletazos de uno en uno con un animal que siempre salió con la cara arriba. Dejó una media estocada.

El cierraplaza soseó de salida y no mostró buenas condiciones en su paso por el capote. Salió manseando del caballo. Decisión mostro el confirmante Pulido, pero el toro nunca terminó de transmitir y salió siempre con la cara abierta.