Por Redacción 
Fotos: J.L Pinilla
El Hotel Avenida de Zaragoza acogió en la tarde de hoy el tercer encuentro organizado por la Escuela Taurina CETA Mar de Nubes. En esta ocasión, la protagonista fue la torero Cristina Sánchez, quien compartió con los aficionados reflexiones y vivencias de su trayectoria en un acto moderado por la periodista Elena Salamanca, quien destacó su amistad con la torera desde hace años.
Sánchez rememoró con emoción su reaparición en los ruedos el 20 de agosto de 2016, tras once años retirada, una decisión que no estuvo exenta de polémica. «Pensé en el tópico de que la gente creería que volvía por dinero, cuando no era así», confesó. Por ello, destinó los honorarios de aquella tarde en Cuenca a la investigación contra el cáncer infantil.
La torera reconoció que necesitaba volver a sentir el ambiente taurino: «El olor a toro, a tarde de toros… son sensaciones únicas». También habló de la dureza de la profesión desde temprana edad: «Torear duele, el entrenamiento es exigente, y hay emociones que, siendo tan joven, cuesta digerir».
Entre anécdotas más ligeras, recordó el apoyo incondicional de su padre, mientras que su madre y hermanas «se enfadaron con los dos», bromeó. Incluso su marido le advirtió en tono jocoso: «Si vuelves, nos separamos». Sin embargo, la preparación para aquella tarde en Cuenca fue especial, pues sus hijos, que nunca la habían visto torear, la acompañaron en los entrenamientos.
El momento más emotivo llegó al evocar la trágica tarde en Teruel en la que falleció el torero Víctor Barrio, suceso que ella narró desde los micrófonos de televisión. «Volvimos en silencio, solo se escuchaba el llanto de mis hijos», relató con la voz quebrada.
Más allá del toreo, Sánchez repasó otros proyectos, como su marca de ropa —que abandonó por el estrés que le generaba— y su actual faceta como apoderada del novillero portugués Tomás Bastos, tras haber trabajado con Raquel Martín y Antonio Ferrera, quien le mostró «la otra cara del toreo: la de los despachos».
El coloquio, celebrado en un ambiente distendido, contó con la presencia de representantes institucionales de distintos partidos, como el vicepresidente primero de las Cortes de Aragón, Ramón Celma (PP), los concejales Carlos Gimeno (PP), Ruth Bravo (PP), David Flores (VOX) y Eva Cerdán (PSOE), así como el diputado autonómico Juan Pablo Artero (PP), quienes acompañaron a la torera en este encuentro íntimo con la afición.