El Parlamento asturiano ha aprobado una proposición para solicitar al Gobierno central que clasifique las corridas de toros como maltrato animal. La iniciativa, impulsada por la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé, salió adelante por un margen muy estrecho con el respaldo de PSOE e IU-Convocatoria por Asturies, mientras que PP, Vox y Foro votaron en contra. La propuesta implica modificar las leyes necesarias para adecuarlas a esta consideración.
Durante el debate, Tomé defendió que eliminar los festejos taurinos supone avanzar hacia una sociedad más justa, un enfoque que también compartió el socialista Ricardo Fernández, quien subrayó que se actuará dentro del marco del diálogo y el consenso, en sintonía con la Ley de Bienestar Animal. Ambos expusieron una visión de progreso ligada a la protección de los animales y a un cambio legislativo coherente con esa sensibilidad.
Por el contrario, la derecha política criticó duramente la medida. El diputado del PP José Luis Costillas advirtió que esta decisión supone eliminar una parte esencial del patrimonio cultural e histórico de España. Vox defendió la tauromaquia como un arte centenario y una actividad económica que no recibe subvenciones en el Principado, mientras que Foro recordó que su legalidad está respaldada por la exclusión de los toros en la Ley de Protección Animal y que su regreso a Gijón obedece a la voluntad democrática de los ciudadanos.

