Emilio de Justo certifica su buen momento con tres merecidas orejas

Cerraba la corta pero intensa Feria Taurina de San Pedro Regalado un cartel digno de una plaza de primera. Muy buena tarde de Emilio de Justo, que junto al mérito y su buen lote, pudo cortar tres apéndices, abriendo así la puerta grande del Coso del Paseo de Zorrilla.

Únicamente una verónica pudo dar Morante con el primero de la tarde, que salió algo descoordinado y justo de fuerzas, corroborando esto último en el caballo. Los muletazos fueron de uno en uno y sin llegar al público, que apenas pudo corear cuatro de ellos. Se quedó con el estoque en la mano al entrar a matar en los dos primeros intentos. Dejó una media estocada algo trasera, que le hizo utilizar el descabello. Silencio

Salió el 4º de la tarde con el runrún del público de fondo (debido esto a su justa presentación). Lo quiso parar Morante de la Puebla con verónicas, sin poder dar ninguna de calidad, ya que pese a tener un buen embroque el toro siempre daba un brinco al final de pase, estropeando esto último todo lo demás. Empezó la faena de muleta de manera muy distinta a como terminó el primer tercio. Un inicio muy torero que arrancó de manera seca los oles del público para premiar así el buen hacer del de la puebla. Siguió bien la faena con varios tandas de naturales muy bien ejecutados, pero poco a poco la faena fue de más a menos. Se marchó Morante a por la espada para terminar con una buena estocada. Una oreja

Tuvo que buscar Emilio de Justo al primero de su lote en los medios, donde combinó varias verónicas y chicuelinas, rematando con una garbosa media y arrancando así una fuerte ovación. Viendo la fuerza que tenia el toro, hizo Emilio un extenso y buen quite por chicuelinas, que volvió a arrancar una fuerte ovación. El brindis fue para el periodista vallisoletano Fernando Fernández Román. Comenzó la faena con tandas de cuatro muletazos muy acordes a la embestida del toro, rematando siempre con el de pecho. De especial carisma y empaque fue la última tanda, que sin la ayuda y rematando con un pase de pecho de “pitón a rabo” se fue directamente a por la espada envuelto en una extensa ovación. Estocada algo caída pero eficaz. Oreja con fuerte petición de la segunda y bronca al palco. Dio el extremeño dos vueltas al ruedo.

Se fue muy decidido Emilio de Justo a porta gayola en su 2º de la tarde, señal inequívoca de que no quería dejarse nada atrás. Dio después de recibirle correctamente alguna verónica antes de que el toro perdiera el interés en el capote. Lo dejó muy bien Emilio en el caballo, por el que pasó dos veces. Se fue ovacionado Germán González por su buen hacer en el tercio de varas. Brindis al público del cacereño, que empezó la faena doblándose con el toro, al que dio a placer una tanda de circulares. Siguió Emilio de Justo con varias tandas de naturales en los medios. El toro poco a poco iba perdiendo el interés en la muleta, sobre todo en el segundo muletazo. Aún así Emilio siguió decidido con él y consiguió sacarle alguna tanda más. Se fue a por la espada y antes de matar, dio otra meritoria tanda más. Estocada en el sitio, con la que el toro se fue a morir donde empezó, en los medios. Dos orejas

Soso y desapercibido recibo capotero de Roca Rey a su primero, que salió algo descentrado. Acabó con él en los medios para rematar con una media. Con el toro algo castigado intentó Roca empezar la faena, sin embargo el toro pronto perdió las manos y la faena no pudo ir a más. Lo intentó el peruano de varias formas, pero no pudo. La mejor decisión de Roca Rey fue abreviar e ir pronto a por el estoque. Estocada en el sitio. Silencio

Buen recibo capotero de Roca Rey al sexto y en principio último de la tarde. Meritoria ha sido la actuación de Sergio Molina en el caballo, que con ayuda de los alguacilillos aguantó contra viento y marea para no ser derribado cuando el toro le pegó a tablas. El toro comenzó a cojear y el presidente decidió devolverle.

Salió el sexto bis, de la misma ganadería, al que Roca Rey le paró de capa con varias verónicas y una media. Pelea muy discreta del toro en el caballo, que se llevó de lleno a Antonio Manuel Punta al salir de este. No hubo que lamentar daños, ya que tras ello “Punta” siguió lidiando al toro. Brindis de Roca Rey al público. Inició la faena dándole tiempo y espacio al toro, para ir metiéndole en faena con varias tandas de naturales. Lo siguió intentando el peruano, que consiguió llegar algo más al público que en su primer toro. Como acostumbra Roca, tiró de valor para meterse en la cara del toro antes de irse a por la espada. Buena estocada para dejar al toro fulminado. Ovación