La ganadería de Torrealta ha sido la primera en hacer público que retira los cencerros a los cabestros de su ganadería. Una decisión que responde a la tradición arraigada en el campo bravo, que guarda silencio en señal de luto por la muerte de Cristo en la cruz.
Este gesto, piadoso y respetuoso al mismo tiempo, guarda mayor relación con la zona geográfica del sur de nuestro país; siendo cientos de explotaciones ganaderas las que realizan la retirada de cencerros año tras año. Tras la resurrección de Jesucristo, estos elementos volverán a ocupar su lugar y a ayudar en las labores de campo.
Siguiendo la tradición y haciendo caso de la fe, son muchas más las casas ganaderas que dejan en la intimidad del campo bravo la retirada de la «campanilla». La tauromaquia, en todas las vertientes que la componen, es guardián de la tradición cultural que conforma la historia de España.
El hecho de que la ganadería de Torrealta haya mostrado en redes sociales esta curiosa imagen, acerca una vez más la realidad de la ganadería de bravo a los hogares de los aficionados; poniendo en la actualidad una acción poco conocida.
Fuente: Contrabarrera6